Por qué la obra de arte pictórica como instrumento favorecedor de la memoria
Carmen de Grado de
Mogro
carmendeg2002@yahoo.com.ar
Algún día tal vez se sabrá que no había arte sino sólo medicina
NietzscheIntroducción
Entiendo que la selección de obras pictóricas es un medio privilegiado para trabajar con personas con deterioro cognitivo.
Dado que obra de arte es un término muy amplio debo ir precisando que me refiero a obras de la pintura, a veces también muestro esculturas pero tengo en consideración la importancia del color y de apreciar la obra en toda su extensión (En la escultura queda siempre solamente una cara expuesta) Si bien, las experiencias incluyen visitas a museos, y por lo tanto, la apreciación del original, lo que realizamos en forma habitual es la proyección de obras de arte, ya sea en forma de diapositivas o usando cañón y computadora.
Utilizo, en principio, obras pictóricas figurativas, (no abstractas) es decir, que lo representado alude claramente a objetos o personas de la realidad. Conocer el campo de interés del grupo con el que se trabaja favorece la selección de obras. Pueden ser conocidas o no por el espectador pero deben acercarle una temática que le resulte cara y familiar. Buena parte del trabajo consiste en describir lo que se ve, en dar, entre todos, la mayor cantidad de información de lo observado, en dar también interpretación u opinión sobre la obra. Es en esta tarea cuando nos vamos adueñando de ella, haciéndola propia, dejándola entrar y reconociéndola luego cuando reaparece o cuando otra diferente, del mismo autor, nos es presentada.
Prefiero seleccionar obras que están en los grandes museos del mundo o en los museos folklóricos locales ya que son expresión de la memoria colectiva, tienen alto valor simbólico, han sido elegidas y puestas allí porque dicen sobre nosotros, porque nos encontramos en ellas, porque lo que muestran nos pertenece. Podemos poseerlas. Hacerlo es restaurar la propia identidad y esto nos gratifica. Cierto que para esto, como para todo lo que hacemos, la presencia del otro es necesaria. Otro acompañante, ¨facilitador¨ (Winnicott) que otorga reconocimiento: el cordinador y los compañeros de taller en muchas ocasiones.
La temática de la obra es uno de sus aspectos, pero, el estilo, ese particular lenguaje del pintor es tan expresivo como el rostro humano, como nuestro rostro o nuestro ¨gesto espontáneo¨, (Winnicott) dice más que mil palabras.
Considero el estímulo sensorial de una imagen iluminada, la obra pictórica, un recurso valioso para consolidar memoria, especialmente si esta imagen es percibida como ¨rica en contexto¨ porque pone al hombre en contacto con su mundo y el mundo del prójimo. Nos proponemos acompañar la imagen con la palabra, también rica en contexto. Lograr este objetivo produce el efecto de una creación estética colectiva.
La persona en proceso de Alzheimer está perdiendo contexto, su ¨déficit sensorial identificatorio¨ ( L M Sanchez) da cuenta de ello. ¨Jugamos¨ a la recuperación del contexto en presencia de un objeto de alto valor simbólico, resultado de un tiempo y una cultura. ¨Jugamos¨ en el sentido de Winnicott, utilizando la obra como objeto transicional, que está dentro del reinado de la ilusión, a mitad de camino entre la fantasía y la realidad, por ello cercano a lo que produce emoción y gratifica.
1 - La obra de arte pictórica como imagen
La proyección de imágenes favorece la memoria en el sentido de ligar representaciones de distinto tipo: de imagen y de palabra
En el proceso patológico de pérdida de la memoria lo primero que se borra es la representación de palabra. ¨Dejamos de hablar de corrido¨, decimos temerosos, frente a esta falla en el discurso, bastante habitual pasada la mitad de la vida. Nos inquieta, ya que conocemos el derrotero que aparece en situaciones patológicas, entre ellas, el Alzheimer.
La imagen contribuye a la organización del pensamiento y al recuerdo en todos nosotros, cuánto más, en personas con déficit de memoria en cualquier estadío que estén.
En el mundo letrado, todos compartimos la experiencia de haber tomado un primer libro con el que aprendimos a leer. No importa qué método se nos impartiera, todos los libros traían la imagen, ¨la figurita¨, decíamos, al lado de la expresión escrita. Figurita salvadora que nos ayudaba a descubrir lo que decían esos símbolos aún desconocidos.
En la historia de la humanidad, la imagen precedió a la expresión oral y ésta a la expresión escrita. En los orígenes de la escritura, la egipcia es un buen ejemplo de la estrecha relación entre la imagen y la palabra escrita. Los primeros jeroglíficos egipcios que provienen de hace 5000 años, eran imágenes. Configuraron el primer alfabeto que además de ideográfico era también fonético.
Todos tenemos recuerdos de obras literarias bellamente ilustradas. De qué manera estas obras se unen a un estímulo visual, la ilustración, que alimenta nuestra imaginación con una comprensión y aproximación estética más completa y descriptiva. Cuántas veces nos encontramos detenidos en el encantamiento que la imagen produce al despertar emoción en nosotros. Podemos recordar, por ejemplo las ilustraciones de Gustave Doré de la Divina Comedia o el Quijote, y gracias a ellas decir más sobre el texto. Aún cuando hayamos leído la obra con dedicación y especialmente si ya ha pasado un tiempo, la imagen que en su momento acompañó la lectura persiste en nuestra retina, fue más directamente a nuestro sentir que la palabra y es ella la que ahora ayuda más a recordar la historia.
Los ilustradores, grandes conocedores de las expresiones gráficas de su tiempo y su cultura, se adentran en el espíritu de aquello que ilustran y acompañan el texto, contextualizan la obra literaria. Esto es lo que hace también el coordinador terapeuta avezado en el tema de utilizar obra de arte en un taller de memoria. Son las personas participantes quienes le dan el texto. Seleccionará aquellas pinturas más adecuadas para brindarles un ¨contexto¨. Serán los participantes quienes pongan la palabra describiendo lo que ven.
Esta sencilla consigna es la primera: ¨describan lo que ven¨
Podremos ir contribuyendo a una descripción más completa, si es necesario, preguntando: ¿Cuántos personajes hay en la obra?¿De dónde viene la luz? ¿Cuál aparece como personaje central? ¿Por qué? ¿Qué color o colores predominan?
Aparecen en esta descripción semi-pautada, comentarios relativos a lo que conocen de la obra. Ejemplo:¨ las ropas que se muestran son de comienzos de siglo¨ o ¨el autor de esto es Miguel Angel¨ etc
Otras relativas a la interpretación Ejemplo:¨ el autor le ha puesto estos colores para transmitir tristeza¨.
O comentarios relativos explícitamente al impacto estético que les produce Ejemplo: ¨esta me gusta mucho más que la otra¨
Será tarea del coordinador terapeuta ir uniendo todo esto en forma de constantes micro devoluciones, tomando para ello textualmente lo que cada uno de los participantes dice e integrándolo al decir grupal de manera cada vez más ajustada a las obras que se observan y describen.
En el proceso de dementización observamos que a la pérdida de la representación de palabra sigue, en otro momento involutivo,¨ un pensamiento rudimentario sobre la base de la representación visual y del afecto, ese zócalo del pensamiento¨, al decir de Peruchón, Le Goues, que sostiene toda posibilidad de ligazón entre representaciones.
El afecto, básicamente en sus formas de amor y temor, tendrá un enorme valor en todo aprendizaje. El afecto estará unido a la imagen como lo estuvo en tiempos tempranos del desarrollo. Una gran cantidad de estímulos: auditivos, olfativos, visuales, táctiles y gustativos brindados en una íntima relación con otro significativo serán aquellos que nos hacen humanos y completan nuestra complejidad cerebral. Son estos estímulos sensoriales, transmitidos gracias al maternaje, los que tienden las redes de todo aprendizaje. Son las imágenes de todo tipo las que nos van permitiendo construir mundo en el inicio de la vida.
La palabra, a diferencia de la imagen, está compuesta por símbolos que son una abstracción, tienen una relación puramente convencional con aquello que representan y han sido incorporadas en un momento posterior del crecimiento. La palabra es adquisición posterior a la imagen y no tiene con el afecto relación intrínseca alguna. La palabra mediatizará la relación del hombre con su mundo. El embrión percibe sonidos del medio ambiente exterior que podrán despertar en él sensaciones primarias relativas al miedo (un fuerte estampido) o a lo grato y placentero (una música suave). Las palabras de mamá o papá pueden producir el efecto de una música en un recién nacido pero no entenderá su significado; sí, el gesto (sensación visual) o la connotación afectiva con las que son pronunciadas (sensación auditiva).
En el proceso de dementización se pierde primero lo que se ha adquirido más tarde. La palabra es adquisición posterior a la imagen y efectivamente es la representación de palabra la primera que se borra. Si acercamos imagen a quien está perdiendo memoria le facilitamos el recuerdo.
Cuando hemos seleccionado las pinturas en sintonía con el grupo, ya sea por su estilo o temática, esa expresión estética acorde despierta un ¨cómo me gusta¨ frente a la obra que es especialmente colaborador en la consolidación del recuerdo.
La imagen que la obra de arte ofrece es básicamente concreta, aún cuando tiene un contexto histórico cultural y produce impacto estético y en este sentido trasciende lo concreto.
Es concreta por su conexión con el mundo de las apariencias, ya que siendo arte figurativo, da cuenta de la realidad, esto es, de lo que observamos en el mundo exterior. Vemos un paisaje, un interior, una naturaleza muerta, un retrato o un acontecimiento con muchos personajes. En esta primera parte de la aproximación a la obra, aún personas que tienen fallas importantes de memoria, pueden ser muy participativas y ¨acertar¨en la descripción de lo que observan.
La imagen de la obra de arte tiene un contexto histórico cultural y produce impacto estético.
El hombre se ha ido expresando con producciones artísticas de la pintura en forma diferente según las culturas y los tiempos. Sus obras dan cuenta de los lugares y las épocas en que se produjeron. Guntrip nos dice: ¨ Son expresión simbólica de la plenitud de su vivir personal¨. En este sentido la imagen proyectada de la obra de arte trasciende lo concreto y tiene una dimensión estética espiritual. El artista ha ¨jugado¨ y ha logrado, ejercitándose, una expresión en colores y formas sobre una superficie, con la cual nos está diciendo:¨este es mi mundo, así lo he construído yo, así lo veo, lo siento, lo conozco¨. También nos dice: este mundo es el resultado de mi cultura y de mi época y da cuenta de los problemas que he enfrentado para expresarme y de mi tenacidad para resolverlos¨ Claro que algunos se adelantaron a su tiempo y soportaron el rechazo de sus contemporáneos.
Un pintor del siglo XV, empecinado en resolver problemas de perspectiva, produce una obra pictórica diferente de otro, de un siglo más tarde, cuando este tema ya ha sido suficientemente estudiado y trabajado. Un pintor moderno puede dejar de interesarse completamente por esa cuestión de la perspectiva, ya no tiene que dejar testimonio de los acontecimientos que observa, para ello está la fotografía, más le interesa tener su propio estilo y ser auténtico.
Todas las obras pueden resultar valiosas y podemos gustar de aquellas que pertenecen a otro tiempo. A diferencia de lo que ocurre con la ciencia, en el arte, es aceptable nuestra preferencia por obras de la antigüedad. Si adhiero a lo expresado por un científico del Renacimiento, surge obviamente el absurdo de tomar como cierto un concepto que ha sido, hace ya mucho tiempo, cuestionado y perimido. No sucede lo mismo en lo que se refiere al arte. Es totalmente aceptable que ciertas personas prefieran una expresión artística de lejanos años y culturas y otras, aquello que brota de nuestro ambiente contemporáneo o socio político.
Según sus intereses y conocimientos, el observador participante sentirá que algunas pinturas lo enriquecen y otras le resultan más ajenas y extrañas. Dada la selección que hemos realizado, es probable que al escoger previamente las obras que consideramos más afines con los participantes, estos encuentren que todas le son considerablemente ilustrativas, pero aún así, unas lo serán más que otras.
Si en el primer momento: ¨describan lo que ven¨, poníamos el texto para acompañar la imagen con la mayor veracidad y correspondencia posible entre lo observado (imagen) y lo descripto con la palabra, es ahora cuando más datos aparecen sobre la historia personal del sujeto, es lo que conocen lo que más enriquece el contexto. Se incluyen aquí experiencias de vida, y a veces la interpretación y el impacto estético están muy ligados al conocimiento.
Las personas que tienen fallas de memoria se encuentran inhibidas cuando se trata de discurrir con la palabra porque notan que les faltan las palabras, pero ante la presencia de una imagen visual se sienten, por el contrario, fuertemente estimulados. La imagen sirve de reaseguro, los sitúa en el lugar del recuerdo y saben que pueden empezar por allí.
Sabemos que el déficit de los sentidos se ha estudiado y considerado un síntoma más de la demencia pero, como nos dice Luis M Sanchez,. ¨la afectación mayor se produce en la componente identificatoria de los mismos¨ y ésta se distingue de lo sensorial perceptivo. Cuando decimos la componente identificatoria de los sentidos, entendemos toda esa compleja red neuronal que es la más afectada en los pacientes con demencia. Comprende registro de todo lo que el sujeto ha conocido, sentido y experimentado. Se evalúa no como reacción inmediata a un estímulo sensorial sino como respuesta que lo involucra en su subjetividad. Por ejemplo, refiriéndonos a un estímulo visual, no un flash de luz que nos permitiría evaluar lo sensorio perceptivo, sino la fotografía de un familiar, adecuada a la evaluación de la componente identificatoria. La visión de esta fotografía incluirá sensaciones, afectos, emociones, por lo tanto reconocimiento.
Lo sensorial perceptivo es tenido en cuenta en la primera parte de nuestra aproximación a la obra cuando preguntamos ¿Que ven? Si frente a La mujer del suéter rojo de Berni una persona responde por ejemplo: ¨una mujer con un suéter rojo, se observa con claridad la trama y el punto del tejido ¨, su descripción nos dice de un excelente nivel perceptivo visual .
La componente identificatoria supondría, sin embargo, cuestiones referidas a los otros tres aspectos que nos proponemos evaluar. Es decir, integrar con ésto, el conocimiento, la interpretación y el impacto estético, siempre tan llenos de reminiscencias. Estaría en comentarios tales como: ¨Tiene un gesto pensativo y triste¨.(interpretación) ¨Pareciera que al usar el rojo, Berni (conocimiento), ha marcado más el color bronceado de su piel y sus labios rojos (interpretación e impacto estético). A mi me recuerda la gente que conocí cuando vivía en Corrientes, debe ser por eso que me gusta tanto. Pasé muchos años en ¨( impacto estético a partir de la reminiscencia) Casi todos estos comentarios están teñidos de recuerdos del pasado y cargados de alusiones a lo personal, autoreferencial y emotivo.
Ittelson dice en su libro sobre percepción:¨siempre que percibimos externalizamos algunos aspectos de nuestra experiencia y creamos para nosotros mismos nuestro propio mundo de cosas y de gentes. El mundo tal y como lo experimentamos es un producto y no la causa de la percepción¨ (Citado por Rof Carballo Biología y Psicoanalisis, pág. 368) El producto de tantos recuerdos anteriores, emociones, conocimientos, información y de la incorporación de la novedad. ¡Cuántas zonas centrales del cerebro colaboran en nuestra construcción del mundo!
Pribram revisa el esquema clásico del arco reflejo y dice que debe ser sustituido por lo que el llama TOTE, proceso test operate test exit. Explica que¨ los impulsos aferentes estan influídos permanentemente por estímulos que proceden de la médula, del tronco del encéfalo, del cerebelo y hasta de la corteza motora mediante las conexiones eferentes de las fibras gamma¨ (Citado por Rof Carballo Biología y Psicoanálisis. Pág. 370)
Entendemos que el cerebro está constantemente experimentando cambios en sus configuraciones internas, en su ¨red neuronal de reconocimiento¨ (Luis M Sanchez) con arreglo a sus proyectos que se relacionan tanto con el mundo externo como con el mundo interior.
Elena Oliveras, en su libro Estética, la cuestión del arte (pág. 34) nos dice que la obra de arte permanece a través del tiempo y está abierta a nuevas posibilidades de sentido. Distingue entre la percepción y el percepto. La percepción es un mecanismo psicofísico, es el resultado de la impresión de un estímulo sobre un órgano y ¨el p ercepto, en cambio, es algo más abarcativo y complejo. Es todo lo que está en la percepción actual y también antes de ella, aunque no se reduce ni se explica por la memoria, si bien esta no deja de intervenir. Es un ¨vibrar la sensación¨ . Es sobre todo enigma¨.
Describiendo los girasoles de Vincent van Gogh nos dice ¨han sido cortados de la planta y parecen vivos como si estuvieran aún en ella. Pero van camino hacia la muerte. Los tallos se curvan y luchan por mantenerse erguidos, firmes. Es la misma lucha entre la vida y la muerte que pueden experimentar los humanos. El mayor enigma está en la apelación a lo humano estando ausente la imagen del hombre¨
Encuentro una evidente correspondencia, entre los conceptos vertidos por la Neurología y los expresados por la Estética cuando ambas disciplinas refieren a la percepción.
El percepto es equiparable al concepto de componente identificatoria de los sentido s. Es este aspecto de la percepción el que permite esta ¨fusión de horizontes¨. El horizonte del pintor y su tiempo con el de un observador actual unidos en la misma emoción y dimensión espiritual universal y particularísima.
La propuesta es estimular esta complejísima red neuronal creando un medio facilitador, acompañante, donde la imagen y la palabra se conectan permanentemente como también la emoción y la capacidad de abstracción y sublimación
La imagen en relación al hemisferio derecho del cerebro. La palabra en relación al hemisferio izquierdo
Leonard Shlain en su libro El alfabeto frente a la diosa. El conflicto entre la palabra y la imagen (la traducción es mía) nos dice que durante los primeros dos millones de años, ambos, el cuerpo de los homínidos y su cerebro crecieron lentamente. Y luego en el siguiente millón de años un cambio significativo ocurrió. Mientras su estatura aumentó minimamente, el cerebro adquirió una libra (450 gramos) de tejido neural, principalmente en el neocortex. Al mismo tiempo, las funciones del cerebro se separaron en dos, un hecho necesario, ya que la evolución debía acomodar un lóbulo para dar lugar al lenguaje Todos los vertebrados, comenzando por el pez, tienen un cerebro de dos lóbulos que realizan el mismo tipo de tareas. Los hemisferios humanos aún cuando aparecen simètricos, son funcionalmente diferentes. Esto se llama laterización. Un puente de fibras neuronales llamado cuerpo calloso conecta e integra los dos lóbulos corticales así que cada uno sabe lo que el otro está pensando.
La mayoría de la gente sabe que cada hemisferio controla al lado opuesto del cuerpo y que ambos trabajan en constante acuerdo.
Shlain, neurocirujano, nos dice que hacia fines del siglo XIX, comenzaron a estudiarse las diferencias entre ambos hemisferios merced a pacientes que habían sufrido traumatismos. Los científicos de las neurociencias, examinando a pacientes con daños cerebrales y a pacientes normales mediante sofisticados scaners han podido investigar cada hemisferio en forma relativamente separada.
Las disfunciones, como resultado de un daño en el hemisferio izquierdo en los diestros, es tan calamitosa que los científicos tradicionales lo llaman el hemisferio dominante. Algunos han objetado la simplificación del esquema de lateralización cerebral, sin embargo, algunos hechos son indiscutibles. Si una persona diestra tiene un daño importante en su hemisferio izquierdo, con pocas excepciones, un déficit catastrófico del habla, de su lado motor derecho y una disfunción en el pensamiento abstracto ocurrirán.
Inversamente daño en el hemisferio derecho le privan a la persona de resolver problemas espaciales, reconocer rostros, apreciar música además de paralizar el lado izquierdo del cuerpo.
Es el hemisferio derecho, el más antiguo, el que está ya avanzado en el útero cuando el lado izquierdo recién comienza a desarrollarse.
Shlain, nos dice también que recientes investigadores han identificado los sentimientos de felicidad, optimismo y alegría en el lóbulo frontal izquierdo indicando que no todas las emociones residen en el hemisferio derecho.
Me parecen importantes los conceptos previos para entender esta percepción abarcativa, totalizadora de la imagen, a la que se accede fácilmente. Ante su estímulo, aún personas con un considerable deterioro cognitivo responden describiendo lo que ven y aludiendo a anécdotas personales que tienen una fuerte connotación afectiva: ¨esta obra la vi cuando viajé con mi marido a Roma o ¨a mi ese rostro me recuerda al de mi hermana¨
Durante muchos años he utilizado el cuento como herramienta de trabajo con personas normales o con diverso grado de deterioro cognitivo y al hacerlo he advertido la importancia de una cuidadosa descripción de imágenes visuales, y también táctiles, olfativas, auditivas, sensoriales en fin, como el elemento que más impacto produce y que más directamente toca la emoción, resultando, por lo tanto, evocador, estimulante para asociaciones y comentarios.
2 - La obra pictórica como productora de la experiencia estética
Allí está la obra, para interpelar al otro, es una invitación a que el espectador la contemple y se exprese, a que se adueñe de ella, la penetre y la transforme con su visión y aprecio. Como nos dice Eco, las obras de arte son ¨abiertas¨, aceptan un número ilimitado de interpretaciones. Entiendo que podemos expresar nuestro sentir y dar opinión sin el temor de caer en el error, a diferencia de cuando expresamos conceptos científicos o filosóficos. Es más. La obra nos pide que continuemos con ella la tarea de búsqueda de complitud, tal vez el pintor haya trabajado mucho por ello y logre transmitirlo hasta el punto de contagiarnos ese entusiasmo Parece maravillosa y completa pero siempre pide más, aún así, aún cuando tengamos la ilusión de completarla nos aparece simultáneamente la imposiblidad .
Prefiero seleccionar entre las obras más conocidas, que se encuentran en los grandes museos. Cuando han sido vistas y apreciadas con anterioridad, hay ya un camino hecho hasta ellas que facilita el acercamiento. Es como encontrarse con una parte de uno mismo y celebrar el reencuentro.
Elijo, en principio, obras caracterizadas por la belleza, por ser creadoras de formas y porque representan o reproducen la realidad. Busco que la temática que tratan pueda ser evocativa y significativa para aquellos a quienes se les presenta.
Observo que, en ocasiones, el grupo es muy sensible y se siente muy estimulado por pinturas que incluyen lo feo (Goya, Berni) o que no reproducen la realidad sino el mundo fantástico (El Bosco) o lo abstracto (Kandinsky)
Me parece muy importante la flexibilidad del coordinador en la selección de obras, que estén seleccionadas escuchando lo que el grupo o la persona individual a quien se ofertan trasmite. Como el terapeuta que responde a lo que el paciente le relata estableciendo un vínculo que le permita. intervenir eficazmente, así el coordinador que presenta pinturas elije también considerando la sensibilidad y gusto de quien observa. Siendo capaz de introducir lo nuevo no en forma arbitraria sino con acierto y sutileza.
La obra citada de Elena Oliveras desarrolla las ideas de Gadamer en La actualidad de lo bello. Este autor cita ¨ las bases antropológicas de la experiencia estética en la necesidad de juego, de símbolo y de fiesta¨. Entiendo que cuando abordamos personas que están involucionando nos aparece la urgencia de crear una atmósfera favorecedora del juego, de la participación activa en la creación de símbolos y de la gratificación que el encuentro con lo humano y la belleza produce.
Complementario del enfoque de Winnicott, el concepto de juego de Gadamer nos dice del ¨aspecto esencial de automovimiento que no tiende a una meta final sino al movimiento en cuanto movimiento y que gracias a él, el ser humano accede a su autorrepresentación.¨
¨Si el ser humano tiene necesidad de juego, también tiene necesidad de simbolizar, de entrar en contacto con ¨un fragmento del Ser que promete completar en un todo íntegro al que se comprometa con él¨. La experiencia simbólica del arte es, en síntesis, una experiencia de integridad: nos hacemos uno con la obra completándola momentáneamente en su trascendencia a través del tiempo y completándonos nosotros en ella también¨.
Para Gadamer fiesta y arte son sinónimos de participación. Fiesta es lo que une a todos; la fiesta es para todos ¨La fiesta es comunidad, es la presentación de la comunidad misma en su forma más completa¨. Algo semejante ocurre con el arte. Nietsche había ya señalado el hecho de que el arte es el más alto punto de comunicabilidad entre los hombres.
3 Descripción de una experiencia
No se es rico en conocimientos por el sólo hecho de poseerlos, sino fundamentalmente por la forma de aplicarlos
José Bleger Temas de Psicología (Entrevista y grupos)
Algunas consideraciones teóricas sobre lo grupal
Los aportes teóricos sobre lo grupal de Anzieu, Bernard, Kaes y Bleger me parecen indispensables para la realización de esta tarea.
El grupo que describo es un grupo reflexivo, en el sentido de que cuando un integrante trae datos de su historia personal no debemos referirlo a sus relaciones tempranas y edípicas ¨sino a la situación actual que ha reactivado tales recuerdos¨ (Los encuadres reflexivo y terapéutico. Marcos Bernard. Ficha)
Tomo al pie de la letra las consideraciones de Bleger sobre grupo operativo (Temas de Psicología. Entrevista y Grupos) aunque preferiría, pensando en estos grupos, poner el acento en lo lúdico y marcar algunas diferencias respecto del grupo operativo. Tomando la definición de Pichón Riviere ¨grupo operativo es un conjunto de personas con un objetivo común al que intentan abordar operando como equipo¨
Podemos decir que este grupo de gente mayor hace suyo el objetivo que se les propone y operan como equipo para lograrlo. Pero, mientras éste se centrará en un ¨tópico de estudio¨ nuestra propuesta de ¨ver la obra de arte entre todos y trabajar sobre ella¨ no refiere a verla como riguroso tópico de estudio sino como objeto sensible y conceptual con el cual jugar y pensar creando así un ámbito que mucho tiene que ver con lo lúdico. Bleger pone el foco en el ¨factor humano¨ ya que es este factor el que favorece o dificulta la posibilidad de desarrollos. Son los aspectos del factor humano los que nos inquietan, tanto en el aquí y ahora de lo grupal como en la aprehesión de la obra de arte donde el factor humano es lo trascendente.
Se trata de una experiencia grupal que tiene que ver con el aprendizaje y con la memoria donde permanentemente se les proponen juegos y ejercicios con consignas para su realización
Sobre la institución donde se realiza.
La experiencia que se describirá se realiza en una residencia geriátrica de la Ciudad de Buenos Aires, en un barrio céntrico, elegante, clase media (media-media, media-alta). El lugar es una antigua casa de dos pisos, reciclada, con detalles que hacen al cuidado del anciano: pasamanos en las paredes, camas ortopédicas, baños acondicionados a propósito, puertas con llave en la escalera que va al primer piso, etc. Se observa buena iluminación, olor agradable, decoración en colores acogedores y cálidos.
Cerca de la puerta principal hay un amplio hall. Hay una, o en ocasiones dos personas, con sus computadoras respectivas, que reciben a la persona que ingresa o despiden a quien sale. También encontramos una gran cartelera con fotografías color de los residentes y sus terapeutas, mención de las actividades y el menú correspondiente a cada día.
Se observa cierto número de personal que asiste, de acuerdo al promedio de residentes ( 60 en total entre las dos plantas)
Forman el plantel profesional: un médico geriatra, una musicoterap éuta, una terapéuta ocupacional, otro terapista que utiliza diversos recursos y una enfermera a cargo de las ayudantes. Gente de una iglesia cercana va una vez por semana a dar la comunión. Se festejan los cumpleaños y otras fiestas: 9 de Julio, Primavera, Navidad, inicio del año, etc.
El dueño de la residencia es psicólogo y tiene la especialidad en psicogerontología. Después de presentarle mi propuesta, acordamos mis honorarios y quedo comprometida a realizar la actividad una vez al mes. Tengo la opción de ir las veces que crea necesario y en el horario de mi conveniencia (por supuesto me ajusto a las necesidades de la casa) a realizar entrevistas, hablar con el personal y dejar hoja ilustrada del programa de la próxima presentación para que pongan en cartelera.
Previo a la presentación.
Se realiza una primera aproximación diagnóstica, principalmente a los fines de adecuar la selección de obras a los residentes que participarán. Están distribuídos en dos sectores: p lanta baja y planta alta, cada uno con una población de aproximadamente veinte personas asistentes (Algunos, no participantes, permanecen en cama o en sus habitaciones) Hay evidencia de que están acostumbrados a las actividades, tienen una actitud colaboradora.
Realizo una entrevista breve en el lugar donde están ubicados. Tomo nota de sus nombres y apellidos y anoto lo más saliente, especialmente sobre lo perceptivo (visual y auditivo) y tiendo a una evaluación de lo cognitivo que irá siendo completada en próximos encuentros, a partir de las respuestas que van dando al material que se les muestra
Reitero mi presentación en forma grupal y relato sobre la actividad: digo que veremos grandes obras, especialmente de la pintura y cada uno contará lo que ve y lo que piensa sobre el tema, el color, la forma, etc. Diré que nuestro trabajo consistirá en ejercitar nuestros sentidos y nuestra sensibilidad, en comunicarnos, ejercitar la memoria y realizar juntos un programa de tipo cultural. No nombro a ningún artista pero ellos me preguntan entre otras cosas: ¿Ud. mostrará obras de Miguel Angel o de Picasso, por ejemplo? Respondo que como nombran a Miguel Angel la próxima vez mostraremos algo de su obra.
Sobre el material que se selecciona para un primer encuentro
Se llevan las obras en la forma de diapositivas (En otros lugares se usa cañón y computadora. Las imágenes han sido obtenidas con la cámara digital y colocadas en un CD y o en memoria USB)
Se han seleccionado las siguientes obras:
- La creación de Adán (pintura Capilla Sixtina)
- El nacimiento de Eva (pintura Capilla Sixtina)
- Cristo Rey (pintura Capilla Sixtina)
- Sibila Délfica (pintura Capilla Sixtina)
- El pecado original (pintura Capilla Sixtina)
- Moisés (escultura)
- David (escultura)
- Rostro del David
El lugar de proyección es el lugar donde están habitualmente reunidos que es también el comedor del sector, tanto en planta baja como en planta alta. En cada ámbito se realiza un encuentro de 45 minutos. Con anterioridad se había seleccionado la pa red adecuada para proyectar con el menor desplazamiento posible. Considero importante lograr el apoyo del personal y realizar toda la movilización necesaria a fin de que todos estén ubicados en forma cómoda para observar.
Cuestiones técnicas como la oscuridad que contribuye a una buena imagen, el lugar de enchufes, el botón para prender y apagar la luz, etc. debe ser contemplado previamente.
Presentación.
Llego diez minutos antes para disponer el proyector y preparar el lugar. Es nuestro primer encuentro. He realizado ya una aproximación diagnóstica en días anteriores. Están sentados a sus mesas como habitualmente y necesito la colaboración del personal para que se dispongan todos mirando hacia la pared dónde se proyectará. Una de las empleadas ayuda a realizar esto. Algunos deben moverse de sus lugares, otros no. Pongo música clásica mientras nos ubicamos. Saludo acercándome a cada uno y diciendo sus nombres. Pregunto si han visto en cartelera el tema de hoy. Una de las personas dice: ¨hablaremos sobre Moisés¨.
En cartelera se había puesto una hoja anunciando la actividad donde decía el día, la hora, el tema y una ilustración color
Aclaro que veremos obras del autor del Moisés, Miguel Angel. Una de las señoras agrega Buonarotti.
Exactamente, Miguel Angel Buonarotti, diré.
Pregunto si todos están cómodos y ven bien la primer imagen proyectada. Hay dos personas sentadas a la mesa más lejana a nuestro lugar de encuentro que no se han movido de sus lugares. Una es una residente con alto grado de deterioro, que responde sólo a algunos estímulos en su área más cercana, otra es una mujer de 52 años, esquizofrénica, que no se conecta casi con el grupo quien al ser especialmente invitada responde: ¨yo desde aquí veo bien, no necesito ir más allá¨
Doy algunos datos sobre la vida de Miguel Angel y tomo siempre lo que ellos agregan
Mi relato es aproximadamente este: ¨fue pintor y escultor en el Renacimiento, siglos XV y XVI. Vivió muchos años, llegó a tener más de 90, que en ese tiempo era mucho. Fue muy exitoso en su época. Llamado por el Papa Julio II para que le haga su tumba Miguel Angel se pone a trabajar muy activamente. Hace bocetos de una obra impresionante, va a las canteras a elegir los materiales y cuando retorna se encuentra con que el Papa ya no está tan interesado. Entonces le pedirán que pinte la Capilla Sixtina. Al comienzo, enojado como estaba dice que no, que él es escultor. Pero uno de esos días en que entra en la capilla, su imaginación y creatividad son tales que comienza la obra y no saldrá de allí más que para cosas elementales de la vida. Pone muchísimo de su tiempo en ella hasta darle fin. Veremos algunas escenas de la historia bíblica que pintó en el techo, montado en un caballete. Ustedes me irán diciendo lo que ven¨.
De las ocho seleccionadas, en este caso veremos seis. A veces preferimos detenernos más que apurar el paso y ver todo.
La descripción que el grupo hace de la primera obra es más o menos así:
¨Hay dos hombres recostados y desnudos, uno más joven y otro viejo. El más viejo tiene una túnica y cerca de su cabeza hay niños o ángeles. El joven está totalmente desnudo¨. Al repetir la coordinadora: ¨es una historia contada en la Biblia, en el Génesis, sobre la Creación, uno de ellos dice: ¨el joven es Adán, el otro es Dios¨. Continúan: ¨Las cabezas están de perfil, los cuerpos de frente. Ambos tienen cuerpos hermosos, uno de los brazos extendidos, sus manos parecen tocarse. Dios le está dando vida y espíritu al joven, ambos parecen estar muy concentrados en lo que hacen. Clara dice: ¨El hombre está solo, en cambio Dios tiene muchos cerca de El, un grupo de ángeles y de niños. Los dedos que casi se tocan están puestos en el medio de la pintura¨. ¨Algo está pasando por allí¨, dice Fany, ¨la vida, el amor..¨ Clara: ¨Eso pienso yo a veces: que no estoy sola, siempre hay alguien que me tiende la mano¨.
Surgen algunas preguntas: ¿Esto está en el techo? ¿Esas rayas que se ven son rajaduras? etc.
Hay activa participación de algunos, otros Susana y Marta están durmiéndose. La oscuridad contribuye a ello. Prendo la luz y me acerco a Marta, una persona con considerable deterioro cognitivo que ha tenido una fructífera vida pública en el ámbito cultural y cuyo nombre resuena en los medios. Se de su sensibilidad, apenas la toco abre los ojos y dice algo referido al tema.
Naturalmente el grupo se ha ido comprometiendo con la intimidad de la obra. Se logran los aspectos de juego, símbolo y fiesta que mencionábamos. Hay juego en el aspecto de movimiento, por ejemplo. Describen personajes, posiciones, relaciones entre las figuras representadas.
Se le adscribe sentido, aparece la obra como símbolo: ¨Dios le está dando vida y espíritu al joven, ambos parecen estar muy concentrados en lo que hacen¨. Este sólo comentario da cuenta de la participación no solo por expresarse allí, en nuestro grupo, en el aquí y ahora, sino por aludir a la universalidad del hecho que pone a Adán y en él a todos los hombres como receptores de lo que Otro les trasmite desde el confín de los tiempos. El espectador, este grupo y cada uno de los participantes desde su particular posibilidad, fundiéndose con el autor, con un relato que ha existido por siglos y con la obra que busca ser completada.
Hay fiesta en el sentido que Gadamer expresa de comunidad participativa.
La expresión subjetiva de quien comenta es explícita: ¨pienso que no estoy sola, siempre hay alguien que me tiende la mano¨. Clara en el lugar de Adán, y en el del género humano.
Pasamos a la segunda obra El nacimiento de Eva. Como el tema es la mujer continuamos con la Sibila Délfica, un robusto cuerpo femenino y nos centramos en su rostro. Las siguientes son Moisés, David y el rostro del David.
No casualmente hemos comenzado por estos cuerpos humanos y estos rostros fuertemente expresivos o por historias que marcan nuestros orígenes.
Si observamos el grafismo infantil, aquel común a todos nosotros veremos cuan cerca de él esta lo corporal. Alrededor de los dos o tres años un pequ eño de nuestro medio entra al mundo de la representación gráfica con algo que su ser corporal le permite configurar: el renacuajo, un redondel con colita, y luego una figura humana rudimentaria con los miembros en forma de palos probablemente. Casi enseguida o simultáneamente aparecerá el círculo, representativo de la cabeza, los ojos y el rostro.
El rostro humano la imagen del mundo sensible más significativa, la que primero que nada captura nuestra atención, la que más fuertemente impacta nuestro psiquismo.
Ya Kaes, citado por Didier Anzieu nos dice en Lo imaginario y el grupo: ¨ciertas representaciones del cuerpo son representaciones del grupo, como si una correspondencia fundamental uniera, tal vez en su mismo origen, el espacio del cuerpo con el espacio del grupo, como sugiere el mismo término de organización¨
Los últimos diez minutos están destinados a recordar y ganar premios. Tengo cuatro sobres preparados con algunas de las imágenes que vimos. Haré la descripción y ellos tendrán que decir cual de las obras que hemos descripto es. Quien primero lo dice la gana. Escribo en el sobre el nombre de la persona ganadora y lo aplaudimos.
En síntesis
El deterioro cognitivo que aqueja buena parte de nuestra población hoy y que aparece cada vez más amenazante, ya que sabemos se incrementará a medida que crezca nuestra población añosa, nos acerca un gran desafío: entender que es la presencia del otro, de otro significativo, lo indispensable para sostener la vida y el sentido.
Quien acerca una obra pictórica debe saber que lo que está acercando es la visión de un hombre, el pintor, con una cosmovisión de su mundo, con un mensaje, con la expresión de su ser más íntimo y personal. Pero por más importante y valiosa que la obra sea per se, está siempre el entorno y el vínculo entre quienes interactúan. La presencia del coordinador y sus compañeros en la tarea de observar será el más estimulante ingrediente en toda labor de recuperación y prevención.
Bibliografía
Anzieu D. y col. El trabajo psicoanalítico en los grupos Ed. Siglo XXI Méjico 1979
Bernard Marcos Los encuadres reflexivo y terapéutico. Ficha
Bleger J. Temas de Psicología. Entrevista y Grupos. Ed. Nueva Visión 1979 Buenos Aires
Carballo Rof. Biología y Psicoanálisis. Descleé de Brouwer 1972 Bilbao
Correa J., de Grado C. La narración de cuentos a un grupo de gerentes internados. Acta Congreso de Gerontología y Geriatría 1986
Gombrich E H Historia del Arte Editorial Sudamericana
Le Gouès G., Péruchon M. Destinos del pensamiento en el curso de la enfermedad de Alzheimer. Ficha.
Olivares E. Estética. La cuestión del arte Ed Ariel Filosofía 2004 Buenos Aires
Sánchez L.M. Teoría de articulación de factores psicosociales y sensoriales deficientes en la desintegración cerebral en casos de Alzheimer. Geriatrianet.com 2006; 8(2).
Shlain,Leonard The alphabet versus the goddess The conflict between word and image. Penguin compass 1999 www.alphabetvsgoddess.com
Winnicott D. W. Realidad y juego. Ed Gedisa 1971 Barcelona
Zarebski G. Hacia un buen envejecer Emece Editores S:A: 1999 Buenos Aires