Número 13 - Octubre 2003

Acerca del silencio en los geriátricos

Rosa Rur
rosarur@yahoo.com.ar

Mi inquietud acerca de este tema surge,hace ya 13 años,a partir de la necesidad de la internación de mi mamá en un geriátrico cuando tenía 91 años.

En aquel entonces me impresionó fuertemente ver a tantas personas mayores reunidas bajo un mismo techo en silencio,cada uno enfrascado en su propio mundo, el único sonido que se escuchaba era el de un televisor que nadie miraba,en una actitud de incomunicación total.

Desde ese momento,en que comencé a dedicarme a trabajar con ancianos,me he preguntado:

Cual es el significado de ese silencio?

Qué se quiebra con la internación?

Por qué la palabra queda relegada?trato,desde entonces de ir buscando pistas en mi trabajo cotidiano,en los desarrollos teóricos de diferentes autores

Debemos tomar en cuenta que,por diferentes motivos(económicos,enfermedades,familiares)los ancianos que son institucionalizados ingresan con diferentes patologías,de modo que la ruptura de su medio social,la angustia que esta situación provoca,la falta de proyectos,los quebrantos narcisistas,los desapuntalamientos violentos,el lugar que ya no ocupa,el rol que ya no juega,el duelo por la pérdida de sus seres queridos,el aislamiento,situación en que la muerte se vuelve algo cotidiano,profundiza,en muchos casos estas patologías,y modifican su realidad bio-psico-social..

Considero que estas pueden ser algunas de las causas que provocan el ensimismamiento que los lleva al silencio.

Don Chicho(92 años)italiano,nacido en Africa,contesta a mi pregunta:porque no hablan entre uds.?---de que vamos a hablar,si no salimos?Nuestra vida es solo mirar televisión!!En realidad ni la miran,de modo que este "ver"es virtual.

Pero cuando abro el espacio para la actividad,comienza a contar con lujo de detalles,en un castellano apenas comprensible,momentos de su vida,riquísima,a juzgar por lo que cuenta,durante la 2da. Guerra mundial y observo como su mirada,casi siempre opaca y ausente,se ilumina.Vuelvo a comprobar cual es el verdadero valor de la palabra y la necesidad de que alguien ESCUCHE.

Esto se repite en casi todos los geriátricos.

Confirmo nuevamente que EL GRUPO,LA ACTIVIDAD GRUPAL,es un espacio privilegiado por muchísimas razones,es el lugar donde se pueden compartir penas y alegrías,angustias y deseos

Ël grupo provee el apoyo adecuado,porque actúa como mediatizador entre el yo y la cultura".(1)

Ayudarlos a encontrar nuevos motivos de interés,nuevas fuentes de placer,crear nuevos vínculos con personas desconocidas,crear un espacio confiable donde LA PALABRA sea el eje de la comunicación,irá invistiendo con nuevos sentidos a sus vidas.

Por eso,la reunión grupal se convierte en algo tan esperado y deseado.

El paso del tiempo,el deterioro físico,la pérdida de roles constituyen una amenaza de desinvestidura a la persona que envejece ,y el profesional"debe poder dar cuenta de porque frente a iguales factores sociales o deterioros biológicos,algunos responden de un modo y otros de otro,algunos sometiéndose,entregándose y otros luchando y encontrando salidas creativas".(2)

La sucesivas crisis por las que van transitando,la pérdida de la imagen que de sí mismo tienen,la dependencia,provoca,en muchos casos un desapuntalamiento que pone en riesgo su propio YO.

Esa caída del yo-ideal,en los casos de narcismo patológico,forjado a lo largo de toda la vida,puede ser otro de los motivos de silencio..

He encontrado en EL CUENTO,como herramienta,un gran aliado para despertar recuerdos,reminiscencias donde la palabra vehiculiza el pensamiento.

Pero esto no solo depende de la idoneidad del profesional que está a cargo de la actividad pues ella ocupa sólo una parte del tiempo,sino también de la ideología de la institución que los alberga.

Si ella está al servicio de la vida,será en muchas circunstancias la mejor opción para aquel que necesita 24 hs. de atención y su familia no puede hacerse cargo.

Pero si el geriátrico es un lugar de depósito,donde se objetaliza al viejo,esta actitud provocará más aislamiento,más inmovilidad,desaparecerá lentamente la palabra o se limitará sólo a lo más primario,a satisfacer las necesidades básicas:la hora de la comida,necesidades fisiológicas,quejas...

Nadie lo toma en cuenta,nadie le habla,nadie le pregunta,nadie lo escucha,entonces para que hablar?

Ese lugar será sólo una antesala de la muerte!!!Se observa en esas instituciones mayor morbilidad,más casos de paulatina dementización,más involución,más silencio.

Si,en cambio,hay por parte de la institución una preocupación real por que el anciano siga ligado lo más posible a sus objetos,a su familia,a sus afectos y junto a eso se les ofrecen actividades de estimulación,dará como resultado mayor sobrevida y lo que es más importante:mayor calidad de vida.

Por y para eso se deben plantear actividades que contengan proyectos,por pequeños que estos sean,tareas donde la palabra,la comunicación sean valorizadas donde las propuestas de actividades sean una rutina,esto será otra victoria sobre el silencio.

La violencia y el maltrato,aunque no sean explícitos,también provocan repliegue sobre sí mismos.

Considero violencia y maltrato a todo lo que se haga en contra del deseo del viejo.Organización hospitalaria,horarios rígidos para levantarse,higienizarse,comer,todo régimen que no considere las necesidades individuales.

Un viejo acostumbrado a levantarse a media mañana,que es despertado de madrugada porque "la nochera"se tiene que ir,es violentado,llamo a eso maltrato.Si acostumbra a comer despacio y lo apuran porque tienen que terminar todos juntos,también eso es maltrato.El viejo es,en esos casos,una tuerca más de un mecanismo perverso.

Si bien comprendo que toda institucion necesita para poder funcionar normas,tal vez se trate de hacerlas más humanas.

Si se queja y no es escuchado.si calla porque teme ser reprimido,se alienta el silencio.

La adaptación a la nueva realidad,la del geriátrico,puede ser un paso positivo o negativo,depende por un lado de la personalidad previa de la persona,mayor o menor grado de patología.más o menos rigidez en su estructura física y mental,mayor o menor flexibilidad adaptativa y por el otro el tipo de institución a la que ingrese.

Por eso es tan importante la elección del lugar.

Hay algunos establecimientos cuya hotelería es de cinco estrellas,pero donde se nota la falta de afecto,una atención formal y despersonalizada,sólo correcta,el resultado?:patologización,declinación,silencio.

Otros,en que lo edilicio no es lo más apropiado,pero donde los aspectos humanos son cuidados,donde la atención y el afecto que se les brinda compensa algunas carencias, se nota mejor vínculo entre la gente y la palabra ocupa un lugar más importante.

Decía al principio que el grupo,en cualquier momento de la vida,funciona como espacio de contención,pero creo que,por la particularidad de la vida en el geriátrico,se acentúa aún más su importancia.

Y con el cuento como disparador(como ocurre en mi caso)se abre un espacio donde la palabra adquiere una dimensión importantísima.

Si bien no considero mi actividad como un lugar psico-terapéutico,creo que la actividad de por sí es terapéutica a juzgar por los resultados que voy observando.

El espacio que se abre da lugar a identificaciones,con los otros,con los personajes de los cuentos,comparten recuerdos,vuelven a la memoria hechos de la propia historia,reminiscencias,recuerdan momentos dolorosos que al compartirse se hacen menos angustiantes,ligado a la transferencia con el coordinador y los demás integrantes,les permite un tipo de elaboración donde se combina el HACER,el PENSAR y el SENTIR y los preserva del riesgo de desmoronamiento que conlleva el proceso del envejecimiento.

Las pérdidas reales e inmaginarias,corporales y afectivas,las situaciones traumáticas,se van elaborando en el trabajo de reflexión,procurando instalar en los viejos la idea de que la vejez no es inevitablemente sinónimo de enfermedad,que no todo es pérdida,que aún en situaciones dolorosas se pueden encontrar espacios de placer,donde revalorizar el pasado,valorizar el presente y proyectar el futuro.

"Sabemos que los silencios provocan,en algunos casos grandes montos de ansiedad y angustia,instalándose como un obstáculo.La falta de palabras remite al vacío,al sentimiento de indefensión,requieren del analista una función más participativa,con intervenciones a modo de preguntas,gestos y señalamientos que actúan frente a la inhibición y retracción del yo,como apuntalamiento,facilitando su expresión".(3)

Desde mi formación de Psicóloga social,con orientación psicoanalítica y al ser mi actividad "Estimulación de la memoria",tomo aspectos del párrafo anterior en mi trabajo cotidiano abriendo permanentemente un espacio donde se jerarquiza la palabra y la escucha tratando de apartar al viejo de la queja permanente,de la nostalgia por el tiempo ido,dando lugar al humor,al placer,a la aceptación de las diferencias,reflexionando juntos sobre todos los temas que preocupan desde siempre al ser humano:el amor,los celos ,la envidia,el paso del tiempo...

El dispositivo grupal es el lugar ideal donde todos los temas aparecen,las preocupaciones se comparten,las opiniones y los consejos entre los integrantes fluyen naturalmente.

Muchas veces se escucha decir a los viejos"mientras la palabra está dentro tuyo sos dueño de ella,pero una vez que sale,ella se adueña de vos",será por eso que el viejo calla?para seguir siendo dueño de algo?,aunque esta sea una propiedad negativa,insalubre.

Es entonces tarea del profesional señalar,mediante diferentes técnicas creativas los beneficios que produce el hablar,contar,compartir penas y alegrías,preocupaciones y dolores.

El cuento,usado como herramienta despierta reminiscencias,recuerdos,aúna realidad y fantasía,brinda momentos de placer y goce,desarrolla la imaginación,creatividad y capacidad de concentración y lo que es más importante,logra que el silencio,que parece inevitable y estructural,se convierta en conversación,vínculo,intercambio,contención.Un espacio donde dejar su legado,trascender,saber que escucha y es escuchado.

No sólo se trata de prolongar la vida,sino darle mejor calidad.

"Vivir la vida del hombre lo bastante justificada como para seguir apegado a ella incluso cuando se han perdido todas las ilusiones y se ha enfriado el ardor vital".(4)

Una respuesta adaptativa es aquella capaz de aceptar la vida plena y lo más creativamente posible.

Estimular las capacidades que el anciano sigue teniendo a lo largo de la vida posibilita que el silencio se revierta.

ROSA RUR

BIBLIOGRAFÍA:

1) La crisis de Dorian Grey y el riesgo de desinvestidura: Lic.Diana Singer

2) Hacia un buen envejecer:Lic.Graciela Zarebski.

3) Psicoterapia psicoanalítica en la vejez:Lic. Sara Chapot y otros.

4) La vejez:Simone de Beavoir

5) La cultura y los ideales del grupo—Los trabajos del envejecer: Lic. Diana Singer

6) El anciano y la violencia social: Dr. Abraham Stoliar

7) La vejez y sus mitos:Jesús Sanchez Caro y F.Ramos.

8) Contar cuentos:Ana Padovani (Edit.Paidós)