Curso Virtual:
Educación para el
envejecimiento
Clase 14:
Sexualidad y amor en los adultos mayores
Dra. Virginia
Viguera
1era parte. Prejuicios .
Qué se dice de la sexualidad en los Adultos Mayores?
Los prejuicios, las idas erróneas, los mitos que pesan sobre el envejecimiento y que forman parte del imaginario colectivo interfieren en un buen envejecer.
Son ideas que están incorporadas a la mentalidad de la gente y que los propios envejescentes se ven en la "obligación" de corresponder ya que participan también de estos estereotipos culturales.
No surgen por casualidad y tienen que ver con una sociedad asentada sobre la productividad y el consumo, en donde las personas se dividen en activas y pasivas según estén dentro o fuera de la rueda productiva.
Forman parte de estas ideas erróneas el considerar a este período como de pasividad, de desapego y auto-exclusión, de enfermedad, de imposibilidad en el aprender y de la pérdida de la sexualidad.
Todo esto da lugar a actitudes negativas, no tienen sustrato veraz ya que son netamente culturales.
Talvez de ellas la que tiene más arraigo es la que atañe a la sexualidad.
Las manifestaciones del prejuicio van desde la mención del " viejo verde" o la "vieja dama indigna" hasta la falta de respeto por la intimidad de nuestros mayores. Recordemos como son tratados muchas veces en los hospitales.
No es ajeno a esto tampoco la molestia de los hijos cuando los padres forman o quieren formar nuevas parejas, como no es ajeno la influencia de los medios masivos de comunicación en donde juventud, belleza física, vigor corporal parecieran ser los únicos valores que cuentan y mostrando a los jóvenes como los únicos dueños de la sexualidad y del placer y goce sexual.
Aceptar la sexualidad de nuestros padres es dificultoso desde la niñez.
Salvarezza dice al respecto en su libro de Psicogeriatría: " Resumiendo, la persistencia de conflictos infantiles inconscientes en relación con nuestros propios padres- reales o imaginarios-; la persistencia de concepciones ideológicas moralistas, trasmitidas por el interjuego de las identificaciones primarias y reactualización represiva impuesta por factores dominantes en nuestra cultura actual, se conjugan para mantener una conducta de negación activa sobre el conocimiento psicobiosocial de la sexualidad de los viejos, convirtiéndola, de hecho, en un problema.
En lugar de poder acceder a ella con un auténtico conocimiento científico sólo podemos manejarnos con pseudoconocimientos, mezcla de prejuicios y falacias.
Para romper esta visión errónea debemos comenzar por revisar cuidadosamente las investigaciones realizadas hasta el momento, las que nos marcarán cuál es la realidad que subyace en la intimidad de la vejez."
No debemos perder de vista además que fuimos educados dentro de una moral represiva y rígida, la moral victoriana que imperó en todo el primer período del siglo XX. , para la que lo sexual era tabú, es decir tema prohibido y castigado severamente cualquier desvío de la misma.
Veamos someramente cuales son las ideas más difundidas en este campo:
- * que el envejescente al igual que el niño carecen de sexualidad.
- * que la menopausia marca el final de la vida sexual de la mujer.
- * que al quedar sin menstruación, también queda sin deseo sexual.
- * que cuando hay actividad en los envejecentes, esta es perversa, es decir anormal.
- * que la sexualidad está unida a la capacidad reproductora y que no tiene sentido sin ella.
- * que los envejescentes van perdiendo el deseo sexual
- * que son incapaces de sentir placer.
- * que no pueden despertar placer en el otro
- * que la actividad sexual se agota si hubo excesos sexuales en la juventud.
- * otros.
Nada mas inexacto que pensar que en el envejecimiento se pierde la sexualidad.
El hombre es un ser sexuado desde que nace hasta que muere, lo que va cambiando es la forma de manifestarse esa sexualidad.
Es una función humana y por tanto tiene connotaciones bio-psico-sociales. Esta función está presente siempre.
Lo que cabe resaltar es que muchas veces se confunde sexualidad con genitalidad.
