Número Aniversario (10 años!!) - Noviembre 2008

Editorial

Virginia Viguera
virginiaviguera@gmail.com - tiempo@psicomundo.com

¡ Estamos de festejo! ¿Y qué festejamos?

Festejamos los 10 años que cumple la Revista Tiempo.

Nacida allá por la primavera de 1998, con un cúmulo de inquietudes, ansiedades por el comienzo de una actividad nueva en el campo de la Psicogerontología, incertidumbre acerca de a cuántos llegaría, deseos de poder concretar lo que queríamos, dilema ante el formato, la cantidad de trabajos, vacilaciones con respecto a los destinatarios y como apuntábamos en el 1er Editorial, nacíamos "haciendo una convocatoria al aporte de ideas, de interrogantes y de experiencias, desde los distintos enfoques y disciplinas".

Fue inevitable buscar el primer Editorial y constatar que el nombre que pusimos sigue siendo tan significativo como entonces nos pareció y decíamos:

"Nace, en fin, con un nombre Tiempo, que la significa. Porque Tiempo es la dimensión en la que transcurre la vida humana y Tiempo es lo que va marcando el envejecimiento y porque somos pasajeros del Tiempo que en su infinitud, nos recoge cuando nacemos y nos baja cuando el final nos ha llegado."

Festejamos porque en éstos 10 años de Tiempo, también la Psicogerontología ha crecido y ha ido ganando un espacio en el quehacer científico.

Festejamos asimismo el que en ese espacio psicogerontológico hoy se registran profesionales de disciplinas varias, atentos a lo que ocurre con este envejecimiento nuevo que le toca vivir a cada vez mayor cantidad de personas.

Festejamos puesto que, partícipes y víctimas de un mundo en donde las crisis, las guerras, las injusticias parecen haberse adueñado de los sueños, de la vida y de la muerte, hay sin embargo profesionales que estudian, que hacen cosas a favor de los otros, que mantienen una cuota de esa utopía necesaria para poder reivindicar sino la totalidad, por lo menos una porción de la condición humana.

Festejamos el hecho, no menor, que a través de sus 23 números, la Revista Tiempo haya contribuido a delinear, avalar e instalar un nuevo modelo de envejecer ¨El Envejecimiento Activo".

Festejamos y …qué gratificante resulta! el encontrarnos por su intermedio con tantos amigos con los que transitar estos caminos.

Festejamos el que Revista Tiempo trata de acompañar los Eventos, Jornadas, Congresos y difundir todo lo que hace al trabajo psicogerontológico.

Festejamos en definitiva el que muchos estudiantes y profesionales pudieron encontrar en sus páginas virtuales información y bibliografías para su capacitación.

Y Festejamos finalmente que gran cantidad de Adultos Mayores también puedan reflejar y verse reflejados en las Secciones: Se Expresan los Adultos Mayores e Historias que hacen historia. Secciones muy significativas al concederles la vigencia que muchas veces la sociedad les niega.

Y al momento de los agradecimientos, se hace difícil expresar un GRACIAS! tan sentido, a todos los que colaboraron y colaboran aportando sus experiencias y sus saberes para que circulen en el ciberespacio a través de Revista Tiempo, a todos los lectores que nos hacen llegar saludos, felicitaciones, agradecimientos cargados de afecto, un cúmulo de saludos han llegado con motivo de este aniversario, y se repiten en Jornadas y Congresos en los que participamos. Y no por ser los últimos en la mención, son menos reconocidos, gracias a todo el equipo técnico de Psicomundo y a su director Michel Sauval quien siempre sale en nuestra ayuda frente a los avatares que implica coordinar una Revista como Tiempo.

Una disculpa para los que no llegaron a tiempo con sus trabajos, debíamos cerrarlo para que estuviera en término on-line.

Para terminar hago mías las palabras de una colaboradora talentosa como lo es Carmen De Grado cuando dice al terminar su trabajo: "Mi deseo en estos diez años de la Revista Tiempo de Psicogerontología es justamente éste: que podamos juntos, abiertos a la llegada de nuevos aportes, sacar los frutos del camino recorrido y proyectarlo al futuro, siempre sinuoso, incierto pero esperanzado".

¿Por otros 10 años? … y bueno, Vale, como dicen mis amigos españoles: ¡¡Por otros 10 años!!