El titulo que he elegido para la presentación de este caso, es una inversión de la famosa frase del arquitecto minimalista Mies Van der Rohe: " menos es más".
Quitar, vaciar, reducir, es el lema de esta corriente estética, que va a contracorriente de los mandatos de la actual sociedad capitalista, en donde el consumo es la norma.
Quise expresar con este título la dialéctica con respecto al dinero, que establece una mujer de 45 años, a la que llamaré la Sra. P.
Este caso me ha permitido reflexionar sobre dos aspectos que me han interesado y que quisiera poder trasmitirles
El particular manejo de algunas mujeres, con respecto al dinero y en particular a la tarjeta de crédito.
Las dificultades de la demanda, cuando el que pide no es el que demanda.
1 - El dinero
Los valores que predominan en la actualidad giran en torno a dos significantes": éxito y dinero". Si bien ellos no hacen causa del sujeto, son las condiciones a los que el sujeto responde.
He señalado algunos puntos, que posibiliten la discusión:
1.El dinero es un elemento simbólico, de intercambio ineludible y un instrumento privilegiado de poder. La disponibilidad de dinero otorga a las personas recursos para satisfacer sus necesidades y sus anhelos. Pero esa disponibilidad no es similar para los hombres y las mujeres.
"Las mujeres representan el 50% de la población adulta del mundo y un tercio de la fuerza de trabajo oficial, pero realizan casi las dos terceras partes del total de horas de trabajo y reciben sólo la décima parte del ingreso mundial y poseen menos de una centésima parte de la propiedad inmobiliaria mundial"(cifras estadísticas de la UNESCO -1983).
Sin embargo, lejos de hacer un discurso feminista reivindicativo, quisiera señalar otro aspecto de la marginación económica de las mujeres y es el de la "automarginación", que es como señala Clara Coria en su libro"El sexo oculto del dinero", " el de aquellas "que aún con independencia económica no logran ser autónomas con su dinero y agrega": la independencia económica es la disponibilidad de recursos económicos propios, cualquiera sea su origen. La autonomía es la posibilidad de usar esos recursos, pudiendo tomar decisiones y hacer elecciones que incluyan una evaluación de las alternativas posibles y de las otras personas implicadas."Por lo tanto independencia económica y autonomía económica no son sinónimos.
Como instrumento de poder, ha estado histó ricamente en manos de los hombres como dice el poema de Quevedo, ": poderoso caballero, es don dinero". Por razones que no vienen al caso analizar ahora, el dinero ha estado del lado de lado masculino y en ese sentido podemos afirmar que es una insignia o un semblante fálico o sea que lo podemos situar del lado izquierdo de las fórmulas de la sexuación de Lacan.
Podríamos precisar que como tales, se tratan de posiciones con respecto al goce y claramente que en torno al dinero, sabemos que el tenerlo, poseerlo, gastarlo, ahorrarlo, son algunos de los destinos de la pulsión, como bien señaló Freud en numerosos trabajos.
4-Desde la posición femenina, puede señalar que uno de los dos goces en juego, el goce fálico, pasa sin duda por una relación al dinero, en tanto emblema fálico. Como dice Lacan en el seminario "Aún":"La mujer tiene diferentes modos de abordar ese falo y allí reside todo el asunto".
Lo que no es seguro que las condiciones socioculturales, de "dependencia económica" de la mujer, pasen necesariamente por una aceptación de esta dependencia. El "ser la mujer de"...por ejemplo, no determina necesariamente una relación sine qua non, sino que, por ejemplo las estrategias de la histeria de poner en cuestionamiento el discurso del amo, cobran nuevas envolturas formales
De las cuales, el manejo con el dinero y el consumo, sería una de ellas.
2 - Un "síntoma moderno"
Uno de estos síntomas modernos, es el gasto compulsivo con la tarjeta de créditos bien no está tipificado dentro del DSM IV, se podría incluir en el apartado de "trastornos compusivos del acto", en el mismo apartado que las cleptomanías. Lo dejo para la discusión.
La Sra. P. En la primer entrevista dice que tiene "conductas anómalas" y hace referencia en una primera instancia al gasto excesivo con la tarjeta de crédito que le han generado deudas incontroladas".
Dejo para más adelante, el desarrollo del caso, para señalar algunas particularidades con respecto a la tarjeta de crédito.
1º/Se pueden comprar objetos, o adquirir prestaciones sin tener el dinero en efectivo.
2º/Se puede gastar sin la previsión de dinero en la cuenta bancaria.
3º/Se pueden satisfacer los gastos en lo inmediato, o sea que facilita el acto o en este caso el acting.out.
4ª/Es un elemento, por lo tanto, virtual, dentro del registro imaginario, porque posibilita la ilusión de tener más de lo que se tiene y acceder más allá de lo que se puede. El dinero, por otra parte no se toca.
5º/ Y este aspecto atañe directamente al caso, muchas veces quien la utiliza no es titulares de la tarjeta, sino que es una "extensión ", del titular.
El que usa la "extensión" no es el responsable de los gastos dado que la responsabilidad recae en el titular que es quien debe solventar la cuenta, hacerse cargo de las deudas y es quien recibe la información de los movimientos.
6º/ y último, un uso añadido, que es el de "protección", que también va a ser de suma importancia en este caso. El "por las dudas llevo la tarjeta", es una expresión muy frecuente en salidas, viajes, situaciones imprevistas. De ahí, que Fernando Savater, la definió como la "estampita moderna".
Pero cuando hablamos de dinero, efectivo, en talones o en este caso a través de la tarjeta de crédito, no nos estamos situando siempre del lado de la obtención de objetos de consumo, del lado del tener, sino que a veces y esto es lo interesante, el consumir es un vehículo para que falte, para introducir una falta. A veces más es menos.
3 - La Sra. P.
Emigrante latinoamericana, desde hace unos años que reside en España.Casada y sin hijos.
Pero nunca dejó de ser madre. De sus hermanos y de su marido. Es la mayor de cinco hermanos. Todos menos uno emigraron a difer entes paises.
Los padres se separaron, cuando ya todos los hijos eran mayores.
Su familia de origen es de clase media, con dificultades económicas, sustentada por los ingresos del padre, a pesar de que la madre trabajaba en una empresa de servicios publicos.Era funcionaria y se jubilo tempranamente.
Ninguno de los hermanos trabajaba cuando se separaron sus padres, salvo ella que dejó sus estudios a la edad de 16 años, después de obtener un título de perito administrativo que le había permitido trabajar desde esa edad, y tener unos ingresos que autoadministraba para sus gastos.
De su infancia tiene escasos recuerdos, sólo otra emigración, a la edad de 5 años, a una ciudad bastante alejada de su lugar de nacimiento.
De sus hermanos, así como lo hace refiriéndose a su madre, habla en un tono de relato histórico, sin ningún tipo de implicación afectiva. No los ve, no se visitan, no se escriben, no se hablan.
De esta diáspora familiar, un tanto opaca , sólo brilla una figura, el padre, "en realidad" dice, "mi padre era lo máximo. Desde que está con la otra, cortó con nosotras". Frase enigmática, que después desplegará en varias significaciones. El "máximo", que sin embargo, "nos abandonó" dirá más tarde.
La causa de este abandono, como señalé más arriba, fue la otra, la amante de su padre. La "otra" es el tema central de sus quejas, ya que ella según afirma, le" robó " a su padre. Y tras la cual su padre se fue, según ella, casi sin pensar, dejando todas sus responsabilidades, con respecto a su familia. Nunca más les pasó dinero, ni se preocupó por sus hijos, salvo de ella, a la cual llamó a España, ya que él había montado una pequeña empresa, en la cual trabajaron durante un cierto tiempo ella y su marido.
Vemos pues una estructura familiar centrada en el padre, que proporcionaba el dinero para la manutención, una madre que su jubila anticipadamente y cinco hijos que dependen del padre, salvo ella. Hay tres significantes que caracterizan este núcleo familiar: el dinero, como valor que se anhela, pero que nunca se posee( el padre quiebra, el marido lo reemplea en su empresa, ella se va al paro, la madre vive pidiéndole al ex marido dinero que nunca le da), las emigraciones y las peleas.
Estas seran la tónica de la relación entre sus padres, de ella con su marido y de ambos con el padre.
Estas fueron frecuentes y tiene algunos recuerdos de su juventud, de extrema violencia.
4 - Tres momentos del tratamiento
a - el robo:
La sra P. acude con la demanda de otro. La de su marido. De "su descontrol" con la tarjeta y de las deudas que generó quien lo padece es el marido.El es el tiutlar, el que paga y prevee los saldos y quien recibe los extractos ,pero que nunca lee. Es ella quien los esconde, hasta que un diá se lo deja a la vista," en un descuido", dice, hasta que su marido lo lee y la "descubre".Lo que le duele a la sra P. no es el haber gastado y generado esa deuda, ni siquiera su acto compulsivo, sino que al ser descubierta el marido le dice" me has robado".
A pesar de que ella percibe el paro y que éste va a pagar integramente la hipoteca del piso en otra cuenta bancaria, el dinero que "cuenta" es el que él gana y así se lo recuerda frecuentemente.
El dinero que vale es el de él y ella lo acepta.
En este primer momento vemos la dificultad en la demanda, frecuente en la clínica con niños, ya que son los padres que consultan por lo que hace síntoma en sus hijos aunque esto no sea el verdadero síntoma del sujeto.
Es el marido que la manda a que "se trate" , porque tiene un problema de descontrol, para que se corrija y no robe más.El por su parte despliega otra serie de medidas correccionales: le quita la tarjeta, le acompaña a hacer la compra, la cual paga en efectivo y posteriormente le dará la "extensión" sólo para la compra de alimentos y con la posterior presentación del comprobante correspondiente.
La sra. P no manifiesta ni en sus gestos, ni en sus dichos la menor afectación ni queja por estos métodos, dice que se lo "merece", con cierta satisfacción. Se presenta en este primer tiempo como una niña a quien la envían a que la corrijan por que se portó mal y ella obedece .
Pero donde está su demanda?
Su demanda se sitúa más del lado del por que roba.
Del significante "robo", que parece que le duele y que le hace s íntoma, asocia con el robo del padre por la amante, y a otros robos compulsivos
que realizó desde la pubertad.Una serie de objetos en supermercados, dinero a una hermana de su padre y de una tienda donde trabajó.
De todos, señala una característica importante: siempre fue descubierta, como ahora por su marido.
Ante mi interpretación de que "tal vez roba para ser descubierta", se sorprende y trae un recuerdo que guardó, este sí ,cautelosamente, y fue que ella "descubrió" la infidelidad de su padre. Los vio juntos , y cuando volvió a confirmar lo visto, su padre se iba en otro coche.
El padre le negó rotundamente esta relación y ella nunca se lo dijo a su madre, quien lo supo años m ás tarde, directamente de la amante quien la llamó por teléfono.
Podemos pensar que en este primer tiempo, hay un ´sintoma que se presenta en su multíple determinación, de los cuales resumo en dos.
Por un lado, el por qué roba?, que apuntaría al deseo de "ser descubierta" deseo de ser y que está en relación a la culpa de guardar el secreto de haber descubierto. Des-cubierto al padre en su falta, que cubre del lado de la "otra", la que tiene, dado que tiene dinero y poder, ya que es ella quien lo "trae a España".Lo roba.Un poder que le resulta enigmático a la sra P. y que como en todo sujeto histérico, la otra inaugura el misterio de la feminidad .
Por otro , el para que roba?, que se puede pensar más en la vertiente de la identificación, dado que el tipo de objetos que compra con la tarjeta están en la serie de la mascarada femenina. Son básicamente productos de maquillaje, cremas, ropa, aunque nunca se maquilla. Cabe destacar que tanto el padre, como el marido y el amante, trabajan con pinturas.
Por último, aparece la vertiente del objeto, dado que como ella dice que lo que compra"son todas cosas inútiles".Pero ni las tira, ni las usa, sólo las acumula, tal vez para vaciar al otro, al marido, como antes eran otros.
Una manera de inscribirse en el Otro, de introducir la falta, dado que la Sra P. se queja por no haberle faltado a nadie. Nadie la echa en falta. Ni su padre que tiene a la amante, ahora su actual mujer,que lo cubre, ni a sus hermanos, que no le escriben, ni su propio amante que se fue con otra, ni a su madre, que hace un año que no tiene noticias de ella.
Acumula cosas para que algo, en algún lugar falte como dice Lacan en el seminario de"la angustia" con respecto a un caso de cleptomanía.
Un más que introduce un menos.
Segundo tiempo:
b - El desorden y la afonía:
En este segundo tiempo, aparecen dos preocupaciones añadidas al mal trato que le sigue infringiendo su marido en su rehabilitación de conducta.Le controla todo el dia, donde va, con quien va, en que gasto el dinero, etc.También la "obliga" a que lo atienda y le cuide.Se queja gustosamente.
Salvo en un punto de interrogación que le molesta y es el "desorden". Sobre todo de la ropa para planchar, se le acumula, no puede con el exceso, hasta que lo vacía de golpe, quedándose extenuada pero satisfecha. Otra vez el mismo mecanismo : acumula para vaciar.
De este dato que ella incorpora a lo" ingrato de la vida doméstica", se empieza a preocupar y decide buscar un trabajo para así poder pagar parte de sus deudas y pagar sus sesiones.Decisiones que realiza, no sin antes solicitar una reducción de los honorarios,más adecuada a sus ingresos, demanda que acepto.
Constata que en el trabajo le sucede lo mismo:se le acumulan los papeles y se le desordena todo el trabajo, el tiempo le falta hasta que le riñe su jefe.Después de señalarle que parece que " busca jefes que la riñan", añade "como mi padre" y dice que debe ser para que la ordenen un poco.
El desorden le hace síntoma, y es a partir de entonces que se abre la via más dolorosa para esta sujeto y es la relación con su madre.
El desorden es un rasgo de identificación con su madre.Dice de ella, que es desordenada, desorganizada, siempre triste y amargada y vuelve a recordar su jubilación anticipada que nunca entendió, como tampoco su menopausia anticipada, a los 35 años.La presenta como una mujer distante y fría, que siempre peleaba con su padre por el dinero y luego, cuando la Sra. P. tomó el relevo del padre, al irse éste, le pedirá a ella , no ya su dinero solamente, sino que sirva de intermediaria entre los dos,para conseguir una pensión.
Este significante la llevará a otras asociaciones entre las que aparecen el de haber sido siempre la prolongación de su madre y de su marido.
Una "extensión " como la tarjeta.
Trae tres sueños: en el primero aparece la madre diciéndole"tu marido no querrá saber nada mas de ti". El segundo en donde ella espera la partida de la mujer de su amante para irse con él y el tercero en donde la madre estaba en un convento muerta sobre una lápida , sin embargo luego resusitaba con una tos.
De este elemento, que le resulta absurdo, asocia con su tos y la imposibilidad de hablar con su marido y con su madre. "nunca pude hablar" porque nunca me escuchó.
A la sesión siguiente viene afonica.
Tercer momento y actual:
c - El "corte"
De un tiempo de cierto impasse resistencial, en donde lo que se va des-cubriendo es la demanda de amor en este pedido velado de "ser escuchada y amada", se queja del desamor.El de su amante que la dejó por otra como su padre a su madre( o a ella?), el de la madre que la dejó por otra, la hermana pequeña, el desamor del marido, del que actualmente se queja ya que tamién hay una "otra": la madre del marido.El desamor y la presencia de la otra, la dejan al descubierto.
De la mascarada de identificación al rasgo del padre ( dinero, pintura), pasa a la vertiente del amor y a preguntarse que tiene que hacer para ser amada y para volver a amar al marido, el cual poco a poco le ha devuelto la confianza, devolviéndole la tarjeta.
El desorden se ha atenuado, pero a partir de un señalamiento que le hice por su corte de pelo, dado que es un elemento constante en esta mujer, dice que una vez se lo había preguntado a la cuñada que es psicóloga. No sabe por que se corta tanto el pelo, ahora lo lleva como un chico, a la"garçon".Empieza a asociar con que tal vez quiera cortar con algo, algo de su pasado , vuelve a hablar del tema de los robos y de la indiferencia de su madre .Por primera vez llora . A la sesión siguiente dice : " salí muy triste pero aliviada , como si me hubiera sacado un peso de encima, no sé si tendrá que ver, pero llamé a mi madre por teléfono, pero no pude hablar, porque nadie contestó"
Le pregunto que le quería decir y agrega:"no quiero que me pidas que hable con papá ni para que me digas que su mujer es una puta , sólo quiero saber cómo estás".
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