Para colaborar con PsicoMundo, compre sus libros desde aquí!!
Presentaciones de libros

El Jíbaro
Daniel de Michele

Tratar de impresionar con una lista de las obras literarias de Daniel de Michele, es fracamente tiempo perdido, aunque no sería justo olvidar que antes de llegar a la narrativa, ha pasado por la poesía. Pero solo eso. Pasar.

En sociedad con su hermano ha editado "Versos Siameses", y no mucho mas que eso. Mas qe un esfuerzo de hermandad, es mejor pensar que entre los dos apenas lograron completar un libro delirante de poemas (o poemas delirantes, según se vea).

Por ello se puede decir que "El Jíbaro", la novela que ahora propone desde la Editorial Quintaesencia otra creación de su mente afiebrada, es un incunable.

En efecto, no hay prácticamente ninguna posibilidad que alguien se tope con un segundo ejemplar de "El Jíbaro", en cuanto la edición casi completa ha sido enviado a editoriales de México, España, Venezuela y otros países de habla hispana, con el fin de que fuera editado en una escala menos doméstica que la actual.

Luego de meses de no recibir respuesta alguna - pensó que las direcciones estaba erradas -, ni siquiera un piadoso "estamos en otra orientación editorial", el autor ha renunciado a inundar el mundo con su novela y prefiere distribuir solidariamente entre sus amigos los ejemplares que restan. No esperen una presentación formal del libro, pues ya no queda casi ninguno para exhibir ni vender, ni siquiera para leer, y dificilmente haya segunda edición.

Quiza usted no debiera perder la oportunidad de tener en sus manos este ejemplar único, que bien puede resultar tan irrepetible como un cuadro de Van Gogh nunca vendido a nadie

 

Ahora que lo pienso, no hay casi paisajes clásicos de una ciudad en "El Jíbaro", así como tampoco definiciones temporales inequívocas.

La acción pudiera transcurrir en Rosario, Buenos Aires, o en alguna otra ciudad de la Argentina, entre 1970 y el fin del siglo. Gianni, el personaje central de la novela, es un médico clínico de 48 años quien carga con una importante cuota de ansiedad, lo que lo ha llevado a volcar pequeñas fortunas en el psicoanálisis. Mansamente se deja conducir por los caminos que abriera Freud, pero la mansedumbre en su lenguaje nunca fue sinónimo de resignación.

La rutina del jíbaro incluye reducir la cabeza de sus analistas, hasta un tamaño capaz de se manipulada. Es decir, un tamaño apto para manejar con las manos. En ese camino no trepida en utilizar toda su experiencia clínica y su capacidad psicopática al servicio de la destrucción terapeutica del oponente. Para pasar al próximo analista, es necesiario acabar con el anterior, y asó...

"El Jíbaro" es en verdad un tipo infeliz que nunca obtiene satisfacción ni de lo que tiene, ni de lo que consigue. Es un depredador encerrado en una reservación virtual, amenazado por las altas probabilidades de extinción. Es un reducidor reducido.

Volver al listado de presentaciones de libros en PsicoMundo

PsicoMundo - La red psi en Internet