X Coloquio de la Fundación
del Campo Lacaniano
Llevado a cabo el día 18 de Noviembre de 2000
El 18 del mes en curso se realizó el X Coloquio de la Fundación del Campo Lacaniano convocado bajo el título: "EL NOMBRE DE LA FALTA. Necesidad y contingencia en la dirección de la cura".
La propuesta del Coloquio no se puede desligar de la "hipótesis", así denominado por los miembros de la Fundación, que se presenta como fundacional del Campo Lacaniano. La misma se expresa bajo la pregunta: ¿Por qué no hablar de.......Campo Lacaniano?. Este interrogante deja abierta la cuestión de su posibilidad. Es con esta pregunta que se realizó la apertura del coloquio que estuvo a cargo de Noemi Sirota y la propuesta de articular el amor como un nombre de la falta: "amor y falta articulación como propia de la enseñanza del análisis..... ocuparnos del nombre de la falta es, quizás, un modo de decir no al rechazo de las cuestiones del amor que impera en el discurso de nuestra época".
Norberto Ferreira es el presidente de la Fundación y quienes lo acompañaron en la creación de este espacio son analistas en su mayoría de la Escuela Freudiana de la Argentina. El fin es "propiciar, favorecer, alentar y difundir el trabajo e interés en relación con los problemas cruciales del psicoanálisis en intensión y en extensión" ( Norberto Ferreira. 1991, cuadernillo de la Fundación).
Claro que hablar de campo y además lacaniano no deja de invitar, aún siendo una hipótesis, a tener que sostenerlo teóricamente incluso para formularlo como tal. Tarea que no se presenta como sencilla sobre todo si se espera no alejarse de la clínica, es decir, que la pregunta se presente como con cierta necesariedad desde ella.
Sin tener claro aún de qué se habla cuando se habla de campo se intenta dejarlo abierto- ¿se puede hablar de campo energético? Ya que Lacan dice en Encore: "la inercia es una función del lenguaje que hace que toda palabra sea una energía no tomada aún en una energética....". Agregar el significante "lacaniano" desplaza campo lacaniano a campo de goce.
Sus fundadores no desoyen lo que consideran un anhelo de Lacan que quedó inconcluso, la empresa es concretarlo. Ese anhelo esta expresado en la clase del 11 de febrero de 1970: ".....en cuanto a lo que es del campo del goce -lástima- que no se lo llamará jamás, ya que no tendré tiempo de esbozar sus bases, el campo lacaniano, pero yo lo he deseado, hay observaciones que hacer".
Este desplazamiento es justificado pensando al campo del goce como el límite donde Lacan retoma el descubrimiento freudiano., en el punto donde este quedó abierto.
El discurso hace referencia a un saber y el saber remite al goce; el inconciente es un saber que se dice y no se sabe quién lo dice, es un saber que habla solo "pone en juego lo inaccesible de la verdad, si se entiende por inaccesible, que es necesario admitir que el goce es un límite para decirla toda" (del Cuadernillo ya citado).
Lacan procura construir el soporte que corresponda a la inercia propia del lenguaje, a ese goce, "las cadenas, los ronds de ficcelles, el mismo nudo borromeo, podrían ser soporte de ello, más aún, no sólo soportarlo, sino cernir, arrinconar ese goce" (Cuadernillo).
La dirección de la cura es la elaboración del goce que es necesario cernir.
"Campo Lacaniano" no intenta dar cuenta de una unificación por la vía del atributo (clínica lacaniana, topografía lacaniana, psicosis lacaniana, etc.), sino establecer funciones para nombrar alguna diferencia en la praxis. Es la clínica del objeto a. El goce que no se elabora ni interpreta sino a partir de un semblant propone el lugar del analista como semblant del objeto a.
En este X Coloquio se presentaron dos mesas diferentes integradas por 3 o 4 expositores y un coordinador. Por la tarde la presentación de dos casos clínicos y palabras de cierre a cargo del Presidente.
Las cuestiones que más han insistido en rasgos generales, haciendo honor al título de la convocatoria y al proyecto de arribar a la formación de un campo lacaniano, son: la diferencia entre azar y contingencia, determinación, estatuto del objeto a como falta opuesto al goce, el goce como obturador de la falta, movimientos de la falta articulado a un caso clínico, falta y nombre propio, pérdida del ser y ser en la identificación al rasgo unario-ideal del yo, dirección de la cura, el amor de lo contingente a lo necesario y de lo necesario a lo contingente.
La Fundación del Campo Lacaniano cuenta con una página en Internet desde hace aproximadamente un mes. Allí figuran todos los coloquios nacionales e internacionales y los trabajos que se han presentado en éste último.
Lic. Ana Tavilla
Equipo de redacción de PsicoMundo Argentina