Gobierno de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires
Secretaria de Salud - Dirección de Salud Mental
Centro de Salud Mental
Nº 3 "A. Ameghino"
Jornadas
2001
La clínica en el hospital público
Consecuencias psíquicas de la devastación del lazo social
21, 22
y 23 de Noviembre del 2001 - Centro Cultural General San
Martín
"...Fue entonces cuando hubo como un desbordamiento general de los vicios. El pudor, la buena fe, la verdad, fueron desplazados por el mundo del fraude, la traición, la violencia y una avaricia insaciable... la hospitalidad dejó de constituir un asilo seguro..."
Las metamorfosis - Libro 1º
Ovidio - Siglo I a.C.
Nombrar, es nominar esos primeros momentos de una existencia: la de un sujeto con su futura historia personal; la de un país,Argentina, con su historia colectiva; la de un evento, Jornadas Ameghino 2001.
¿ Porqué nombrarlas, darle existencia de este modo : "La clínica en el hospital público. Consecuencias psíquicas de la devastación del lazo social"?
"Devastar", es destruir o asolar una cosa. "Destruir", es arruinar, inutilizar. Fig. quitar los medios con que alguien se mantiene. "Lazo", es una atadura o nudo de cintas; también es vínculo, obligación.
Los factores culturales inciden en los mecanismos psíquicos, son tiempos de desamparo. ¿ Qué consecuencias producen en los lazos sociales, en los familiares, en los sujetos, las políticas fundadas en el predominio de un inconmensurable apetito de utilidades?. Si las condiciones se dan, el hombre se desenmascara y se comporta como una bestia salvaje, por eso los pueblos están a menudo al borde de la desintegración.
La sociedad argentina, ha sido marcada por la violencia, la crueldad y la desaparición de ciudadanos. Hoy el peligro es que desaparezca el sujeto ,que detrás del consumo se consuma.
Son tiempos de precariedad del empleo, flexibilidad laboral, desocupación, lejos de facilitarse, la vida en común, se entorpece, es el temor lo que domina. Frente a las catástrofes naturales los hombres se solidarizan, pero, ante las catástrofes sociales se dividen, segregan y fragmentan.
En la clínica cotidiana en el hospital público escuchamos los modos en que se presenta el malestar de esta época. Los rasgos distintivos de estos tiempos se anudan a las condiciones fallidas de la estructura y a la respuesta de cada sujeto con sus fragilidades y padecimientos.
Las políticas de salud mental deben reconocer la singularidad de los asistidos por su malestar psíquico y su condición de sujetos de derecho, garantizando su atención en los establecimientos estatales. En estos tiempos de desocupación y pauperización, más que nunca, el Estado debe ser responsable y garante de la asistencia pública y gratuita.
El caos social, la desorganización, favorecen el aumento del dolor psíquico, el sentido se suspende. Estas condiciones minan la estabilidad de los hombres. La historia, la narración, la transmisión tienden a la organización del sentido, a ubicar al individuo como un eslabón del lazo de las generaciones que lo anteceden y lo sucederán.
Apostamos a la palabra para que la transmisión de la historia, la posibilidad de reescribirla permita instalar un tiempo que contemple la elaboración del pasado, el saber hacer con el malestar, y augure los deseos por venir.
Los invitamos a participar de este encuentro, de estas jornadas para confrontarnos nuevamente con los desajustes propios de lo humano.
Subcomisión de Jornadas